
Lo idóneo en política o lo políticamente correcto en la sociedad actual del empoderamiento de las minorías emergentes (la democracia inversa) o evolución política no virtuosa, es la nueva normalidad, la nueva conciencia. Lo guay es plegarse uno mismo, como un armadillo contra cualquier amenaza de pensamiento crítico, disidente y antagónico con la posverdad oficial. Con independencia de los 100.000 millones de neuronas y miles de millones sinapsis complejas que poseemos en el cerebro, algo de la maquina biológica perfecta, semejante a la de Turing, ha dejado de funcionar. “los humanos hemos detenido la evolución y aparentemente retrocedemos”. Seis millones de años de evolución se han visto comprometidos con la estupidez humana de última generación. ¿La civilización tal cual la hemos conocido y representado, está tocada…?
Lo importante hoy día, no es la renovación del poder judicial “jueces y juezas”, lo relevante para el gobierno comunista tribal de (Radio Colifata) está en la proporcionalidad de jueces y juezas y afines, hembras, barones y viceversa, machos, hembras y nuevos géneros en perfecta y sincronizada cremallera pseudo biológica, “one to one”. El problema surge por la demanda agregada de los nuevos géneros sexuales de los colectivos excluidos de la cremallera ideología de género. Una ecuación de difícil encaje lógico y racional y científico. No, no es la renovación, sino más bien, el cambio de paradigma ideológico de los jueces. No es renovar, sino cambiar el modelo de pensamiento. Ingeniería social de la parafernalia comunista
“En el campo de la Historia, la aportación de Ortega y Gasset se centró en la Teoría de las generaciones, según la cual, los cambios de época se deben a «variaciones en la sensibilidad vital», que se traducen en el cambio de generaciones: el desplazamiento de una generación vieja por una nueva. Así en la concepción de Ortega, la generación pasa a ser una «categoría histórica», el concepto fundamental de la historiología y el instrumento más eficaz del método histórico. Sin embargo, eso que Ortega denomina «cambios de sensibilidad vital» no es una de las causas del desarrollo histórico sino uno de los efectos en que este se manifiesta. Del análisis del pensamiento de Ortega, se deduce que esos cambios o variaciones son la forma en que se manifiesta el cambio o variación de las Ideas, con mayúsculas. Es decir, «una variación de las ideas disueltas de cada época, que están flotando y que el individuo no las posee, sino que está inmerso en ellas o gravitan sobre ellas». Empero, a su vez, como fue enunciado por la teoría del materialismo histórico y la investigación histórica empírica ha confirmado, esas Ideas, surgen de las condiciones humanas de existencia. Es decir, de las condiciones en que el hombre realiza su actividad productiva, en función de desarrollo técnico y social y de los sucesivos problemas que tal actividad le va suscitando”
Quedémonos con esta última reflexión imprescindible para entender el nuevo cambio de paradigma, que difiere al de fenomenología histórica…“De las condiciones en que el hombre realiza su actividad productiva, en función del desarrollo técnico y social y de los sucesivos problemas que tal actividad le va suscitando” Estos cambios están negados o ralentizados, a las sociedades menos desarrolladas del tercer mundo y, menos dependientes de los Estados ricos y proteccionistas… El mundo a dos velocidades… El estado de bienestar asociado a la tecnología y las sociedades avanzadas y “ricas”, desmontan la conciencia del progreso humano y social asociada al trabajo. El hombre como factor productivo y de riqueza de las naciones….
El problema de una sociedad que produce parias subvencionadas, mantenidas por el Estado y, las políticas sociales expansivas cortoplacistas basadas en la riqueza, y la deuda ilimitada, sólo crea dependencia, miseria gradual, o el llamado, o mal interpretado estado del bienestar. Ya nadie depende de sí mismo y sus capacidades intelectuales de lucha basadas en el trabajo y el compromiso con el país, con la Nación… Las sociedades progresistas se organizan a través del reparto y la distribución de bienes y servicios públicos a base del expolio de los beneficios de las empresas y los trabajadores.
El “Remake” de una nueva civilización gobernada por las minorías empoderadas y destructiva contra cualquier forma de pensamiento critico que no se pliegue a la irracionalidad del buenismo progresista… https://latribu.blog/2017/10/06/el-vacio-del-vertice// Una vez que la tecnología y la sociedad del bienestar (civilización) llegan al vértice de la pirámide, toca retroceder inexorablemente. Es un comportamiento animal que atrofia las capacidades cognitivas de los homínidos Hombres…
Todos alguna vez en nuestra vida, deberíamos leer “El malestar en la cultura, de Sigmund Freud” es una tesis brillante y profético, que contiene muchas claves para entender el cambio de paradigma de nuestra sociedad, y la ruptura con la historia. ¿Por qué el pasado estorba para reafirmar el presente?. También el filósofo español, José Ortega y Gasset, lo planteo en clave de filosofía social, en términos de cambio generación atípico. Salvando las distancias ambas tesis se complementan en un espacio atemporal e imaginativo…